La Pérdida

La Pérdida

Yo he perdido muchas cosas en mi vida… dinero, juguetes, la inocencia, amigos, trabajos, cámaras de video, lentes, relojes… yo mismo me he perdido algunas veces y según algunas gentes soy medio perdido, pero hoy hablaré de algo que mucha gente ha perdido… celulares… yo llevo varios justo el miércoles perdí uno.

Agarré vuelo y de un ágil salto cual chapulín me subí a la plataforma en la que desfilaría, eran aproximadamente las 6 de la tarde del 30 de abril y estaba a punto de comenzar el desfile del Día del Niño, anduve midiendo mi espacio, digo por aquello del baile que me iba a ejecutar, y el camión se movió unos metros, digamos unos 100, cuando ya dijeron que tenía que empezar el desfile busqué mi cel y moles!! ¡No estaba! le pedí a Joaquín y a Dinno que lo buscaran, pero fue una encomienda que culminó sin éxito:

Así medio triste me marqué a mi número, todavía sonaba pero nadie contestó, empezó el desfile y traté de sobreponerme a mi reciente pérdida, “el show debe continuar” pensé, y empecé a mover el rabo para deleite de todos los asistentes. Cuando se terminó el desfile volví a llamar, y ya me mandaba al buzón, le mandé varios mensajes ofreciéndole dinero o un celular nuevo, realmente el celular no me importaba sino los números, eso es lo que más batalla uno, pero las horas pasaban sin recibir una respuesta. Pasó todo el día de ayer sin recibir una señal, hoy a las 12 del día, recibo una llamada: ¡la persona que tenía mi celular se había comunicado con mi amigo Paco y me lo quería regresar! Me dijo Paco: me habló un señor, me dice que le llames y te regresa tu celular, llamé al número que Paco me dio con un hombre de apellido Zermeño, me dijo: “te espero por el boulevard Tepic-Xalisco estoy en una grua”, pues ahí voy, pasé al cajero para retirar el dinero que yo le había prometido, y cuando llegué, me dio el celular e inmediatamente le entrego yo el dinero, me dice: “yo no te estoy cobrando, te lo regreso porque a mí se me han perdido celulares y el aparato vale madres, lo que importa son los datos y esta cabrón perderlos” yo le dije: “yo le mandé un mensaje a quien lo tuviera le iba a dar ese dinero y ahí está” nos despedimos me subí a mi camioneta y me di cuenta que Zermeño nunca vio los mensajes que le mandé, no llegaron, él no sabía que le daría dinero si me regresaba el celular, o que le daría otro celular nuevo si me regresaba el chip, realmente me lo regreso por ser un buen samaritano, no esperaba nada a cambio de hecho ni siquiera se gastó mi credito, y por eso me sentí mejor de haberle dado el dinero. Bueno, esa fue la historia de mi celular perdido y el como regresó a mí, gracias Zermeño, gente como tu es la que evita que la sociedad se colapse y nos matemos los unos a los otros. Gracias a todos los que me pasaron sus números, y les ofrezco una disculpa por las molestias que esto les ocasionó.

De todos modos me voy a comprar un celular nuevo, pal susto…

y la canción de hoy: por supuesto: "El celular" de los maestros, Los Tigres del Norte, de su disco: 16 Zarpazos