viernes, 11 de abril de 2008

la venganza del Dragon

Normalmente yo soy una persona paciente de buen carácter y muy muy muy tolerable, casi ni me enojo ni me desespero con la gente pendeja... aja, bueno pues como todo buen viaje tenía que tener su negrito en el arroz, y no me refiero al hoover, si no al único detalle malo que paso en todo el viaje, pero que al final resulto en una experiencia para agarrar cura.

Ya saliendo de la perla tapatía, Guadalajara, Jalisco, llegamos a un Seven Eleven, para los que no conocen un Seven Eleven es como un Oxxo, para los que no conocen los Oxxo, pues son como una tiendita de barrio pero más nice, más cara y abren toda la noche.

Total que ya íbamos de salida a Tepic y llegamos a la tiendita esta a comprar comida rápida, desde hace mucho tiempo decidí no comer sopas de vaso, de esas maruchan, porque dicen que se te quedan en las tripas y dado que yo como mucha comida de la calle pues mínimo quise bajarle un poco a comer porquerías, pues que entramos al Seven eleven y elegí comer una sopa que no era de vaso, pero era el mismo principio, le ponías agua, lo metías al micro y ya disfrutabas de un rico shop suey con "riquísimos camarones", no era de vaso, estaba en un platito cuadrado.

Instrucciones:
1. Abra la tapa hasta la mitad, retire los 3 sobrecitos del paquete,
aja y ¿cómo demonios lo abro hasta la mitad si los malditos sobrecitos estaban del otro lado? y de hecho pegados a la tapa, tuve que abrir tooodaaaa la tapa y nada más quedó pegada en una esquina.

2. Vierta el contenido en polvo del sobre en la sopa, agregue agua y pongalo en el horno de micro ondas durante 6 minutos. Vierto el chingado sobre, le pongo agua ya caliente y cuando me dirigía al horno me dice el mendigo puberto pseudo fresa que atendía el changarro: "wey, no lo metas al micro, es que se tira, empieza a tirar agua y ensucia todo..." y yo... bueno. Entonces le pongo más agua hirviendo y me espero a que cosa en el mismo plato.

3. Una vez retirado del horno de micro ondas vierta el contenido de los otros 2 sobres, el aceite y los camarones, mezcle y disfrute! Bueno, no lo metí al horno, pero esperé 10 minutos, ya llevaba 4 más de los que decían las instrucciones, vertí el aceitito... y luego... los CAMARONES!!!! ¡3 estúpidos camarones! ¡TRES! ya se imaginarán de qué tamaño, digo no esperaba buen tamaño pero no 3!!! en fin, me disponía a disfrutar del rico ambigú, tomé el tenedor y eso era como masticar ligas... con sabor a especias claro, por el aceitito... pero la sopa estaba peor que un ligas, procedí y le eché más agua caliente pero eso no mejoró, ya encabronado agarre una bonafont ligeri y me fui a la caja, con el maldito puberto "fresa" y le dije ¿cuánto es? y me dice el estúpido: "wey es que este se cobra antes de servirse... a ver déjame ver si se puede..." claro que se pudo, digo el maldito escáner se puede mover... me dice: "wey son 34 pesos" le pagué y me salí, realmente iba encabronado, con el puberto, con la sopa, conmigo por pendejo y andar comprando esas tarugadas, pero principalmente con el puberto, porque si me hubiera dejado meterlo en el micro se hubieran cocido bien los fideos, entonces dije: vendetta!!! vendetta!!! Agarré la sopa y la coloqué pegadita a la llanta izquierda delantera de la camioneta. Preparamos la cámara y dije: a ver pinche puberto, no quisiste limpiar el micro ondas??? Pues ahora vienes a limpiar esto:





Le di en reversa, el Joaquín tomó la foto y me largué a un Oxxo a comerme un vikingo, un buen y fiel vikingo, sin sobrecitos, sin aceititos, sin agua y sin pubertos...

Solo espero que el "wey" puberto ese me haya estado maldiciendo mientras limpiaba mi "regalito"...